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Después de lo de ayer, nos dimos cuenta de lo angustiada y aliviada que estaba la gente. ¿Contradictorio? Sí, bastante.

Por un lado, había muchos empresarios preocupados porque necesitaban ingresos para pagar los sueldos a final de mes, preocupados porque no hubiera ventas. Muchos pensaron: si esto sigue así, ¿cómo sobrevivirá mi espacio?

Pero para muchos, el apagón fue una forma de pasar tiempo con la familia, salir a pasear, desconectar de la tecnología y vivir más el momento.

Ambas cosas son correctas.

Pero la verdad es:

¿Podríamos haber tomado precauciones? ¿Podríamos haber estado mejor preparados?

¿Necesitamos un apagón para darnos cuenta de que necesitamos dedicar tiempo a estar con nuestra familia?

¿Necesitamos un apagón para ir de repente a comprar y llenar el depósito?

Preparen sus negocios, preparen sus hogares mientras aún estén a tiempo. No conocemos el mañana, pero somos conscientes del presente, del hoy.

El 28 de abril de 2025 fue un día de reflexión para muchos. Un día para no olvidar. Tanto para los empresarios como para los trabajadores, todos somos humanos.

En resumen, queremos que reflexiones sobre lo siguiente:

Hoy, mientras aún tengamos fuerzas y vida, vamos a luchar para que al menos podamos intentar sobrevivir a más de estos acontecimientos. Vayamos un paso por delante y estemos preparados. Ya sea con comida, velas, antorchas, generadores, combustible, etc. Aprende a vivir la vida y disfrútala fuera de las pantallas. Miren al mar, lean libros, salgan a pasear, sueñen, porque la vida es demasiado corta para desperdiciarla en cosas inútiles.